¿A dónde ir? ¿Qué voy a hacer? ¿A qué me voy a dedicar? En noviembre cumpliré dos años ininterrumpidos viviendo en este país (de nuevo), requisito fundamental para pedir la ciudadanía, que a su vez tarda un año o un año y medio. Y entonces, me hago la pregunta: ¿vale la pena? ¿estaré aquí dos años más? O mejor, ¿decido estar aquí dos años más? Qué va a ser de mí. O qué voy a hacer yo con mis decisiones. ¿A dónde irme y qué hacer en ese país? ¿En qué ciudad? ¿Y cuándo emprender una nueva migración?
*
Ganas de viajar, salir un poco. Y al mismo tiempo, no quiero gastar, quiero ahorrar todo para irme después a Londres y estudiar en Rada, así sea un par de semanas. Amanezco deseando.
Que yo soy eso, un actor. No estoy hecho para pasar las horas en una oficina. Pero debo hacerlo por ahora para pagar mi vida. Es temporal.
Le respondí a papá.
*
En el teatro, las actrices recibían al público, unas que hacían de putas, vinieron hacia mí, de tan apurado porque llegaba tarde, no pude controlar mi intensidad y fui… cómo decirlo… O tal vez no. Ellas se lo buscan por ser tan avasallantes con el público. A la que me empujó contra la pared, en un acto reflejo la empujé en defensa, para que me soltara: no me gusta que me toquen. Entiendo que es un tipo de teatro disruptivo, pero vamos, respetemos el espacio de los cuerpos, y si no, supongo que deben atenerse a reacciones como la mía. Continue reading “Mi violencia”